Condenan a un hombre por contratar a su primo para asesinar a su exesposa (pero este en su lugar mató a la hermana de la mujer)

Un hombre, que mandó a matar a su exesposa pero en su lugar terminaron con la vida de la hermana de la mujer, pasará el resto de su vida tras las rejas.

El pasado martes, un tribunal del condado de Snohomish (Washington, EE.UU.), condenó a Kevin Lewis a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. En 2017, el sujeto contrató a su primo Jerradon Phelps para que sacara «del camino» a su expareja y madre de sus tres hijos. El acusado afirmó haber pagado al entonces joven de 19 años 2.400 dólares, según los documentos judiciales, citados por el diario The Everett Herald.

El 20 de septiembre de ese año, Phelps, acompañado de su amiga y cómplice, Alexis Hale, quien le consiguió una pistola, llegaron a una casa en el sur de la ciudad de Everett señalada por Lewis, quien, según el testimonio del asesino a sueldo, nunca le informó que el objetivo era su exesposa y solo le dio la dirección a la que debía dirigirse para cometer el crimen.

Al llegar, Phelps llamó a la puerta principal de la casa y Alisha Canales-McGuire, que se encontraba en la vivienda de su hermana cuidando a sus hijos, abrió la puerta. Las autoridades afirmaron que el presunto sicario disparó a la mujer de 24 años cinco veces antes de huir del lugar con Hale. Ese día, la exesposa de Lewis se encontraba en un viaje de negocios en Nueva York.

Tras casi un año de investigación, el caso se quedó sin resolver hasta que, en agosto del siguiente año, los agentes recibieron una pista: Hale había dicho a sus amigos que la habían contratado para matar a alguien en York Road. Entonces, ambos fueron arrestados.

En julio de 2020, Phelps se declaró culpable de asesinato premeditado en primer grado y fue condenado a una pena de 31 años de cárcel. Mientras a Hale le impusieron una condena de 15 años de prisión por el mismo cargo.