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Alcanza tus metas financieras desarrollando el hábito del ahorro. A continuación te enseñamos como hacerlo:

Establece objetivos y metas.

Define lo que quieres lograr y en qué tiempo. Por ejemplo: un viaje, una nueva laptop en 6 meses, la mitad de la entrada para un auto o vivienda propia en 12 meses. Tener objetivos y metas claras te dará motivación para ahorrar.

Organiza tus finanzas.

Anota todos tus ingresos y haz una lista de los gastos básicos (necesarios para sobrevivir), no básicos (deseos, estilo de vida) y deudas (instituciones financieras, familiares, amigos). Apóyate en este planificador que te ayudará a organizar tu información.

Destina una cantidad fija para el ahorro.

Lo recomendable es guardar al menos 10% de tus ingresos mensuales. Si no es posible, define el porcentaje que mejor te funcione; lo importante es que sea la misma cantidad todos los meses. Recuerda que el ahorro no es lo que sobra sino lo que se guarda antes de gastar.

Prioriza tus gastos.

Analiza si todos los gastos son necesarios. Pregúntate ¿qué pasa si no lo compro? Si la respuesta es “nada”, no es una necesidad sino un deseo. Evita los gastos hormiga como compra diaria de golosinas, bebidas, etc.

Planifica y controla tus deudas.

Luego de hacer tu presupuesto calcula tu capacidad de pago real según tus circunstancias actuales y adquiere solamente los compromisos que puedas cumplir. Recuerda que para cumplir metas la prioridad es destinar una parte de tus ingresos al ahorro, no al pago de deudas. Utiliza esta calculadora para conocer tu capacidad de pago.

Haz crecer tus ahorros.

Busca herramientas financieras que te permitan incrementar tu dinero en el tiempo. Algunas opciones son las cuentas de ahorro programado y los certificados de depósito a plazo fijo.

Genera ingresos adicionales.

Ofrece productos o servicios aprovechando tus conocimientos o habilidades: dar clases, hacer manualidades, preparar comida, etc.