Las autoridades de Brasil investigaban el jueves un video que circula en las redes sociales que muestra a tres personas enmascaradas que afirman haber realizado un ataque con bomba incendiaria para protestar contra un programa navideño en Netflix que algunos críticos han calificado de blasfemo.

Un hombre en el video, cuya voz fue alterada digitalmente, aseguró que el ataque de Nochebuena contra una productora de video en Río de Janeiro tuvo como objetivo al grupo de humoristas brasileños Porta dos Fundos, por su programa en portugués.

El hombre dice hablar en nombre de un grupo, al que llamó Comando de Insurgencia Nacional Popular. El video también mostró a tres personas arrojando bombas de gasolina al inmueble. La policía dijo a la prensa el jueves que las imágenes son verídicas y coinciden con las de la cámara de seguridad.

“Resta probar si existe vínculo de algún grupo con el hecho”, dijo el detective de la policía Marco Aurelio de Paula Ribeiro, agregando que un grupo brasileño integralista negó a las autoridades su participación en el hecho. El integralismo fue un movimiento político brasileño de extrema derecha nacionalista creado en la década de 1930, inspirado en el fascismo italiano.

No hubo heridos en el ataque nocturno y un guardia de seguridad extinguió las llamas, según Porta dos Fundos. La policía está investigando.

El cortometraje del grupo de comedia, titulado “La primera tentación de Cristo”, muestra a Jesús regresando a casa en su cumpleaños 30 e insinúa que es gay. Grupos religiosos reaccionaron furiosos a la representación. Una petición en línea lanzada en Brasil solicitó la prohibición de la película y obtuvo más de dos millones de firmas.

Porta dos Fundos ha defendido su película. “El país sobrevivirá a esta tormenta de odio y el amor prevalecerá junto con la libertad de expresión”, dijo el grupo en Twitter.

La policía identificó un vehículo y una motocicleta involucradas en el incidente y dijo que al menos cuatro personas participaron.

“Vamos a identificar a los autores lo más rápido posible para inhibir futuras acciones que el grupo pueda estar planeando”, dijo Fabio Barucke, subsecretario operacional de la Policía.