Varios centenares de extremistas lanzaron ataques contra las posiciones de las fuerzas gubernamentales sirias en la zona de distensión en la provincia noroccidental de Idlib, perdiendo decenas de combatientes e infligiendo numerosas bajas al Ejército.

Según el Centro ruso para la reconciliación en Siria, al menos 600 extremistas emprendieron 6 ataques contra las fuerzas gubernamentales desde la tarde del miércoles. «Como resultado de la ofensiva, las fuerzas gubernamentales abandonaron sus posiciones en la parte sudoriental de la zona de distensión de Idlib», comunicó el organismo.

Se precisa que al menos 40 militares sirios murieron y que unos 80 resultaron heridos en los ataques. Asimismo, se estima que los grupos extremistas perdieron hasta 50 efectivos y 90 resultaron heridos.

Idlib es la última provincia siria donde varias zonas se mantienen en manos de diversos grupos extremistas afiliados a Al Qaeda, así como a otros movimientos islamistas. Colindante con la frontera turca, esta zona ha vivido una serie de alto el fuego en el último año y medio, que contaron con la mediación de Ankara y Moscú.