Rico Burton, de 31 años y primo de Tyson Fury (boxeador profesional británico, campeón de los pesos pesados), murió este domingo en Reino Unido al ser apuñaleado en el cuello. Fury, de 34 años, le rindió homenaje en su cuenta de Instagram (red social perteneciente a la compañía Meta, calificada como organización extremista en Rusia, donde está prohibida) e hizo un pedido al Gobierno británico de sentencias más duras para los delitos de agresión con armas blancas. Escribió que se estaba volviendo ridículo que «los idiotas lleven cuchillos. Esto debe parar».

Burton fue atacado a las 03:00 de la madrugada en las afueras de un bar en la localidad de Goose Green, Altrincham, cuando intentaba mediar en una trifulca y calmar a un grupo de hombres a los que se les había negado la entrada al establecimiento. Dos sujetos, de 21 y 20 años, fueron detenidos en relación con el asesinato y ambos permanecen bajo custodia policial, según The Sun.

Fue un «ataque sin sentido» y «no planeado», dijo en una conferencia de prensa el superintendente Ben Ewart, de la Policía del Gran Manchester. Opinó que Rico debería estar aún «disfrutando con amigos» y que fue un «final trágico». Según un testigo, la escena fue un baño de sangre. «Otras personas hicieron todo lo posible por salvarle la vida, brindándole primeros auxilios […] Nadie lo hubiera podido salvar«.

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Una ola de violencia con puñales y otras armas similares se ha desatado en todo el país. The Sun informa que desde la semana pasada, al menos 11 personas han sido apuñaladas en Inglaterra y Gales. Yvette Cooper, del Partido Laborista, dijo al respecto que «los crímenes con cuchillos están destruyendo vidas y devastando familias».

Daily Mail informa que tras la tragedia, el primer ministro, Boris Johnson, ofreció este lunes el pésame a Tyson Fury, y defendió las medidas adoptadas por el Gobierno para reducir los delitos con armas blancas.