Altos funcionarios considerados como «aliados de EE.UU.» figuran entre los objetivos del ‘software’ espía israelí

Los políticos alrededor de todo el mundo, incluidos altos funcionarios en materia de seguridad nacional de los países considerados como aliados de EE.UU., fueron blancos de un ataque cibernético contra 1.400 usuarios de WhatsApp en 2019 a través del ‘malware’ Pegasus, desarrollado por la empresa de vigilancia israelí NSO Group. Entre los afectados también se encuentran periodistas y activistas de derechos humanos. Así lo reveló a The Guardian Will Cathcart, director del servicio de mensajería instantánea en Facebook.

Según Cathcart, hay correlaciones entre el ataque de hace dos años, por el cual WhatsApp demandó a NSO Group, y los descubrimientos que salieron a la luz tras una investigación conjunta realizada por 17 medios de comunicación en la que se revelaba que Pegasus fue utilizado para ‘hackear’ los teléfonos inteligentes de periodistas, activistas, ejecutivos y políticos en todo el mundo.

«Los informes coinciden con lo que vimos en el ataque que derrotamos hace dos años, es muy coherente con lo que entonces gritábamos«, afirmó Cathcart.

Mientras, desde la empresa de vigilancia enfatizaron que las cláusulas contractuales obligan a los clientes a usar el cuestionado ‘software’ para rastrear a los criminales, y aseguraron que investigan supuestos casos de mal uso.

Proteger datos personales

En vista de lo sucedido en 2019 y las supuestas conexiones con el ‘software’ Pegasus, Cathcart instó a Apple a unirse a la lucha conjunta de gigantes tecnológicos, entre ellos, Microsoft, contra los programas malignos. Además, subrayó la necesidad de responsabilizar a los gobiernos que recurren a servicios de NSO Group.

NSO Group afirma que un gran número de gobiernos están comprando su ‘software’, lo que significaría que esas entidades, aunque su uso esté más controlado, están financiando el programa.

Caso pendiente

WhatsApp presentó una demanda contra NSO Group a finales de 2019, al sostener que la entidad israelí envió el programa maligno a sus usuarios. Así, sus teléfonos resultaron ‘hackeados’ debido a una laguna dentro del servicio de mensajería que fue solventada. En aquel entonces, unas 100 personas del total de los afectados eran periodistas, defensores de derechos humanos y otros activistas.

Por su parte, el tribunal no pone en cuestión el hecho de que el código maligno, desarrollado por NSO Group, fue enviado a través de WhatsApp, sino que intenta determinar a los responsables, si se trata de la compañía o sus clientes.