Aunque el nuevo Gobierno de Serbia trabajará para acelerar el proceso de adhesión a la Unión Europea, no será antirruso, así como seguirá manteniendo relaciones amistosas con China, declaró este sábado el presidente del país, Aleksandar Vucic, tras una ceremonia de bienvenida a la reanudación del vuelo directo entre Pekín y Belgrado en el aeropuerto Nikola Tesla de la capital serbia.

«Vamos a trabajar rápidamente en el camino europeo de Serbia, y creo que para diciembre podremos conseguir muchos resultados, pero también que el Gobierno ciertamente no será antirruso y mantendrá nuestras tradicionales relaciones de amistad», dijo Vucic al ser preguntado por los periodistas sobre si el nuevo gabinete será proeuropeo o prorruso.

Además, el líder serbio ha señalado que las relaciones de Belgrado con Pekín «son realmente sinceras y amistosas, y siguen desarrollándose gracias a la destacada contribución del presidente Xi Jinping, que ha mostrado un respeto especial hacia el país». Añadió que se esperaba que antes de fin de este año ambos países firmen un acuerdo de libre comercio «que abrirá el espacio para seguir mejorando su cooperación».