Una manifestación de estudiantes de la Escuela Normal Rural Carmen Serdán, ubicada en la localidad de Teteles, en el estado mexicano de Puebla, terminó en una violenta represión con golpes y gases lacrimógenos, lo que incrementó la tensión que estalló desde hace semanas entre gobiernos estatales y los jóvenes normalistas que se preparan para ser maestros en las zonas más pobres del país.

En este caso, las víctimas fueron las estudiantes de una normal que solo alberga a mujeres, quienes el martes se plantaron ante la Secretaría de Gobernación de Puebla para exigir al gobernador Miguel Barbosa que no se disminuya el cupo de ingreso, el mantenimiento de raciones alimenticias, la culminación de obras de infraestructura y ampliación de la escuela y el esclarecimiento de la muerte de dos de sus compañeras.

Además, se solidarizaron con los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Mactumactzá, en el estado de Chiapas, después de la represión que sufrieron el pasado 31 de mayo y que terminó con la detención de 95 jóvenes, en su mayoría mujeres que denunciaron abusos sexuales por parte de los policías.

La protesta en Puebla formó parte de una multitudinaria movilización que se replicó en la Ciudad de México y en Tuxtla Gutiérrez (Chiapas) en apoyo a los estudiantes de Mactumactzá y de las escuelas normales rurales en general.

Sin embargo, elementos policiacos del cuerpo de Granaderos desalojaron con violencia a las normalistas y a quienes las apoyaban, lo que derivó en 32 detenciones y en una catarata de denuncias y muestras de solidaridad.

Sus compañeros de Mactumactzá señalaron en un comunicado que, con esta nueva represión, pareciera que el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador tiene como único interés y cometido acabar con el normalismo rural en México. La acusación se basa en que los gobernadores de Chiapas y de Pueblas pertenecen al partido oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

Indignación

«Un ejemplo claro es lo suscitado hace horas con nuestros compañeros de la escuela normal Rural Carmen Serdán, de Teteles, Puebla, quienes arribaron a la capital de este estado para seguir manifestando sus demandas como institución y que hasta la fecha no han sido escuchadas, por lo cual se plantaron de manera pacífica frente a la Secretaría de Gobernación de la entidad para solicitar una audiencia», explicó el escrito.

Luego de varias horas de plantón, señalaron, la única respuesta del Gobierno del estado fue el desalojo violento y represivo por parte de los granaderos, que con toletes golpearon, patearon y detuvieron a varios compañeros y compañeras que también se encontraban en apoyo al movimiento.

La Escuela Normal Rural Benito Juárez, ubicada en Panotla (Tlaxcala), por su parte, explicó que la Normal de Teteles «a lo largo de los años ha albergado a señoritas que tienen el sueño de superarse» y que, además del compromiso que tiene con la educación, ha logrado que todas las que se forman en la institución se terminen desempeñado en el sector rural.

«Lastimosamente el día de hoy tras manifestarse de manera pacífica en las instalaciones de gobernación en la capital de Puebla, en el cual se buscaba obtener una mesa de diálogo en donde se resuelvan las problemáticas que no han sido atendidas por las autoridades correspondientes, las compañeras y compañeros que se encontraban en el lugar fueron reprimidas por fuerzas policiacas», denunció la escuela, ante lo cual exigió respeto a la organización estudiantil y la liberación inmediata de los jóvenes detenidos.

La represión policial contra los estudiantes normalistas en México es una constante, pero en los últimos años la preocupación se acentuó a raíz de la desaparición de los 43 jóvenes de Ayotzinapa, en Guerrero, un caso que generó una conmoción mundial.

Cecilia González