CREO denuncia irregularidades en la destitución de Ana Galarza

El pleno de la Asamblea Nacional no actuó de manera “legal”. Así lo manifiestan los miembros de la bancada de CREO, al referirse a la destitución de Ana Galarza.

Ellos aseguran que nunca se comprobaron las supuestas irregularidades que cometió la exlegisladora.

El movimiento, que tiene más de 500.000 adherentes, sostiene que la votación a favor de la destitución de la legisladora por la provincia de Tungurahua fue un “ajuste de cuentas”.

Su explicación es que CREO empezó la fiscalización de los propios parlamentarios. Primero con aquellos que cobraron diezmos a sus funcionarios de despacho y consiguió la destitución de una asambleísta del bloque oficialista: Norma Vallejo.

Segundo, logró la destitución de Sofía Espín, de la bancada de Revolución Ciudadana, por cometer actos reñidos con su investidura de legisladora.

“La destitución no afecta la imagen del movimiento, pero sí afecta a la imagen de la Asamblea. CREO inició con la destitución de Espín y de Vallejo. Lo de Ana Galarza fue un ajuste de cuentas, explicó Luis Pachala, de CREO.

Coincide con él Roberto Gómez, exjefe de bloque de CREO: “Queda claro que abusaron de la ley para quitarle su curul a una de las legisladoras que en los dos últimos años fiscalizó incansablemente”, subrayó.

Esta organización también pone sobre la mesa la votación del Partido Social Cristiano-Madera de Guerrero (PSC-MG), que se sumó a la destitución de Galarza.

Para César Carrión, deCREO, la actuación del PSC-MG fue ambivalente.

“Ellos debían haberse apegado al debido proceso y no lo hicieron. No había causal para destituir a Ana Galarza”, dijo a este Diario.

No todos los integrantes del bloque estuvieron alineados. Henry Moreno, quien era de SUMA pero se unió a CREO en octubre pasado, votó en contra de Galarza.

El asambleísta por Pastaza señaló que debe medirse a todos con la misma vara.

“Hay incorrecciones en la gestión, uso tarjeta de los asesores y otras irregularidades que se conocieron en el plenario. La lucha contra la corrupción debe empezar en nuestra propia casa y eso no ocurrió en el caso de ella”, contó a este Diario.

Su votación le costó la salida de CREO, pues sus colegas le sacaron de los chats de la organización. El movimiento de Guillermo Lasso también ha perdido legisladores en el transcurso de casi dos años del actual período.

Al inicio, CREO y sus aliados, SUMA y Juntos Podemos, tuvieron 34 escaños, y se convirtieron en la primera fuerza política de oposición en la Asamblea, pero después ambas agrupaciones rompieron su alianza con ellos.

Actualmente CREO tiene 20 asambleístas (no incluye a Moreno). A pesar de esto Héctor Yépez confía en que CREO gane alcaldías y prefecturas para contribuir a crear empleo, desarrollo y levantar a sus respectivas provincias. (I)